La tala ilegal es una gran amenaza para los bosques nativos del mundo. El problema hay que solucionarlo ahora si no queremos perder los últimos bosques prístinos. Ambientalmente, las actividades ilegales causan una pérdida tremenda para la biodiversidad.
Pero el comercio internacional de productos forestales ilegales también promueve el crimen organizado y todo eso implica corrupción, lavado de dinero, y violaciones a los derechos humanos. Además, las importaciones de madera barata ilegal distorsionan el mercado sesgado y provee una ventaja a compañías que se enfocan en moral y sostenibilidad.
La madera puede ser ilegal en muchas maneras:
En junio de 2001, el Parlamento Danés decidió que toda la madera tropical usada en el sector público debe ser producida legal y sosteniblemente. Esta guía para la compra de madera tropical ha sido preparada por el Ministerio de Ambiente en 2003. Por ahora, es la única guía y no es un requisito.
En marzo de 2003, el Ministro de Ambiente Danés envió cartas a Indonesia, Malasia, Brasil y Rusia, en las que él llamó a la cooperación en la lucha contra la tala ilegal.
La Unión Europea importa aproximadamente 6.7 millones de metros cúbicos de madera tropical, sobrepasado por Japón y China solamente. En 2002, la Comisión de la Unión Europea estimó que aproximadamente la mitad de esta madera es ilegal. La necesidad de detener la depredación en el bosque tropical es obvia, y en la Unión Europea se han tomado iniciativas. Por ejemplo, para detener la importación de Teca de Burma. Sin embargo, la demanda para la legislación más estricta y una prohibición general en la importación no certificada de madera está creciendo rápidamente.
Precisamente la certificación de silvicultura sostenible y la legislación contra la importación no certificada de madera son medidas necesarias contra la cesación de la ilegal y destructiva deforestación del bosque tropical. Otras buenas maneras son la expansión de plantaciones de bosque para que en un futuro se pueda suministrar una mayor cantidad de la madera demandada de plantaciones y no de los pocos bosques naturales que quedan.
A medida que aumente la conciencia de los consumidores, las importaciones de la madera dura certificada y así también la teca cosechada de plantaciones aumentará.
